37 kilómetros de árboles: Nikko Cedar Alley, un monumento natural especial de Japón

La ciudad japonesa de Nikko no es familiar para todos los viajeros, pero es muy colorida. Aquí hay una atracción especial: un antiguo callejón de cedros, que los japoneses han apreciado durante varios siglos.

La longitud de la calle única es de 37 kilómetros, este es el callejón de árboles más largo del planeta, ya que hay información en el Libro Guinness de los Récords. Se compone de 13 mil cedros, y muchos de ellos han estado de pie aquí durante siglos.

Hoy el callejón tiene unos cuatrocientos años. Se plantaron árboles en el primer cuarto del siglo XVII durante la construcción del santuario sintoísta Toshogu. Alrededor de 200 mil cedros se plantaron en ese momento, pero la mayoría de ellos fueron destruidos por la deforestación masiva, la construcción de carreteras y también murieron debido a la mala ecología.

Durante el reinado del clan japonés Tokugawa (1603-1868), que se llamó el período Edo, Nikko fue cuidadosamente atendido por un callejón de cedro. Las aldeas que estaban ubicadas cerca de la calle tenían que mantenerla limpia y reparar regularmente las carreteras. El bosque mismo también fue revisado: si los cedros fueron encontrados marchitados o desarraigados por un fuerte viento entre los árboles, informaron urgentemente a las autoridades de Nikko sobre esto. Después de eso, aparecieron plántulas en el sitio del árbol muerto, por lo que el bosque estuvo sano y salvo durante muchas décadas. Sin embargo, cuando el emperador Meiji llegó al poder (en 1868), todo el país comenzó a acumularse activamente. Se cortaron miles de árboles para que aparecieran caminos en su lugar. Tuvieron que reconstruir el callejón de cedro, pero aún se conservaron algunos de los árboles.

Deja Tu Comentario